Adiós a San Siro: Milán aprueba la venta del histórico estadio al Inter y AC Milan
Los clubes construirán un nuevo recinto y demolerán el actual, tras años de negociaciones y un acuerdo por 197 millones de euros
Uno de los estadios más emblemáticos del fútbol mundial, el Giuseppe Meazza, mejor conocido como San Siro, será demolido tras la aprobación por parte del ayuntamiento de Milán para su venta a los dos grandes clubes de la ciudad: Inter de Milán y AC Milan.
Después de más de 11 horas de debate, el consejo municipal votó con 24 votos a favor y 20 en contra la venta del estadio y de los terrenos colindantes por 197 millones de euros (aproximadamente 231 millones de dólares). La medida permitirá que ambos clubes, actualmente propiedad de fondos de inversión estadounidenses, avancen en su proyecto de construir un nuevo estadio conjunto.
La decisión llega tras amenazas de ambos equipos de abandonar la ciudad si no se les permitía adquirir el sitio. Pocas horas después del anuncio, Inter y Milan emitieron un comunicado conjunto en el que celebraron la resolución como un avance histórico y decisivo para el futuro de los clubes y de la ciudad.
"Nuestro objetivo es construir un estadio de nivel mundial, que se convierta en un nuevo icono arquitectónico para Milán y un símbolo de la pasión de los tifosi en todo el mundo", destacaron ambas instituciones.
Fin de una era
El estadio San Siro, inaugurado en 1926 y remodelado en varias ocasiones, la más significativa para el Mundial de Italia 1990, es el mayor coloso futbolístico del país, con una capacidad de 75,000 espectadores. Su demolición está prevista para después de 2031, una vez que el nuevo estadio, con capacidad para 71,500 personas, sea entregado.
El nuevo proyecto se desarrollará en los más de 28 hectáreas de terrenos públicos ubicados en el suburbio occidental de la ciudad, actualmente ocupados por San Siro. El valor total del plan asciende a 1,200 millones de euros (alrededor de 1,410 millones de dólares).
La concreción de la venta deberá realizarse antes del 10 de noviembre, fecha en que entrará en vigor una orden de protección patrimonial que catalogaría al estadio como edificio público, lo cual impediría su demolición.
El resultado favorable en el ayuntamiento fue posible gracias a la abstención de los concejales del partido Forza Italia, fundado por el ex primer ministro Silvio Berlusconi, quien en su momento fue también propietario del AC Milan.